Elefante terrorista en una taza de té (Arde Sao Paulo)

Este fin de semana se esta viviendo en el estado de Sao Paulo una espiral de violencia sin precedentes. Por lo que nos cuentan, los hechos son los siguientes (aunque los número bailan de hora en hora):

• La organización criminal PCC (Primeiro Comando Capital) ha organizado motines en las cárceles (60 penitenciarías) y ataques a bases y comisarías de la policía (mas de 100).
• Los ataques y motines en las cárceles estaban planeados y se han utilizado fusiles de asalto, armas automáticas y granadas.
• El balance por el momento son: 52 muertos ( 35 policías, 3 civiles y 14 supuestos asaltantes) y 53 heridos ( 34 policías, 2 funcionarios de prisiones, 8 civiles y 6 supuestos asaltantes).
• Trece autobuses metropolitanos quemados.
• Los esfuerzos para controlar la situación han sido infructuosos. Sin embargo en las últimas horas parece que se va tranquilizando la situación y se esta retomando el control de algunas cárceles.

Lo cierto es que no es la primera vez ya que en 2003 y en 2001 se habían producido situaciones similares (nunca a esta escala) . La pregunta es ¿Por qué?. En aquellas ocasiones como en esta se explicó que eran motivadas por el traslado de ciertos lideres del PCC a otras cárceles de alta seguridad (una dispersión de presos).

Este es el punto flaco de toda la historia. Supongamos que en efecto el PCC es una entidad del crimen organizado (que se dedica al negocio de las drogas, armas, secuestros, robos, etc....) ¿Qué ventajas le aporta una acción como estas para su negocio?¿Porque cabrear a la policía si puedes comprarla o mantener una clama chicha que te permita ampliar tu negocio? ¿Por qué motivo un empresario del crimen desearía apavorar a la población? ¿Por qué lanzar una ofensiva de tipo militar?... Estas y otras preguntas sin respuesta me hacen sospechar que es poco probable que estas acciones se encuadren dentro la estrategia de una organización criminal y por el contrario tienen mucha que ver con una organización política. En efecto, no es ningún misterio lo que pasa en Latinoamérica donde las organizaciones criminales tradicionales están fuertemente inoculadas con ideas y financiación izquierdista, estas son usadas como elementos de presión con fines propagandísticos, políticos, desestabilizadores; esta gente esta luchando una guerra y nadie explica cual es. Dicho en otras palabras nos enfrentamos a un fenómeno de tipo terrorista.

Lo curioso es que no hay casi nadie que cuente así la película, ¿por qué quiere ocultarse la naturaleza de estos actos? . Supongo que la propia ceguera voluntaria de los creadores de opinión y la voluntad de los medios de masas de no abrir la caja de pandora de la duda y el miedo. Evidentemente al final tendrán que reconocerlo, están escondiendo un elefante en una taza de té. Esperemos que sea lo antes posible, por que sin conocer el problema resulta complicado vislumbrar siquiera una solución.

Mientras tanto el presidente de la republica reflexiona sobre los hechos con propaganda electoral y un poco de mercancía tercermundista (negritas mías):

Eu não estou nominando ninguém, eu não vou nominar. É uma cultura brasileira de confundir investimento em educação com gasto. De investir em política social com gasto. De vez em quando, se cria a seguinte coisa: precisamos ter um choque de gestão, choque de gestão significa cortar gasto, significa mandar gente embora e eu prefiro utilizar um choque de inclusão.

Nós precisamos investir no povo brasileiro. Essa é a chave da questão, investir nas pessoas, dar comida, dar escola, que as pessoas vão se transformar em pessoas sadias, independentes e saudáveis, e não vão precisar roubar, e não vão precisar matar, não vão precisar fazer isso. Eu lamento pelas vítimas, pelos familiares, mas é o resultado de um país que durante a metade do século XX foi governado entendendo que investimento em educação era gasto, que investimento em saúde era gasto, que investimento em política social era gasto, o resultado é gasto em bandido.

¡Un espectáculo (se nota que el tío esta ya en campaña)! La culpa de estos ataques no es de los pepetradores sino del capitalismo, el colonialismo y el imperialismo apoyado por la oligarquía. La solución gasto publico y política de inclusión social. En fin, repugnante.